Es algo mágico, no se puede expresar en palabras, no se puede imaginar viéndolo. Es algo inimaginable, inesperado, único. Es mi amor, su amor unido en uno. Es tenerle a mi lado, mañanas, tardes y noches, tenerle las 24h del día siendo mío. Poder decir: es mi chico y no lo toques. Pasar 4 meses junto a él, con problemas o sin problemas, queriéndolo como el único chico perfecto en este mundo. Pensar en él, y que se pongan los pelos de punta, oler su olor en la habitación, que me venga su sabor a la boca, dulcemente sentir sus labios, al pensar que le quiero. Y es que no podría imaginar un mundo sin él, no podría ser tal como soy ahora, si no estuviera él junto a mí, porque él es el que me hace cambiar, es él el que elije como soy, el que me muestra la vida tal y como es de una manera dulce. Es el que me pone los pies a tierra, el que me hace crecer por dentro y por fuera, el que me enseña cosas que aún no sabía, el que me hace aprender poco a poco. El es mi chico, el es mi magia, mi droga, mi amor.
